30/6/08

[nuestra vida solo era una muerte lenta...pero al fin y al cabo...muerte]

Ahogados entre tantos engaños, que siempre intentamos esconder, intentamos olvidar nuestra historia, y reconstruir nuestras vidas...piedra a piedra un camino por el cual seguir... Pero cuando los recuerdos vencen, y son tantas vivencias las que cargan a tu espalda, tarde o temprano vencen, y entonces recuerdas y olvidas, vives y sueñas, y siempre...sientes frió y calor, pero no tienes miedo, sabes que pasará y que luego todo habrá acabado, era de esperar...
La última bala la reservo para mi...disparo en el corazón, directo a la herida que tu dejaste, apuntando al centro donde empezó a curarse, donde ahora..solo queda un hecho en claro... eres mi pasado.

Y sientes el dolor en tus ojos llenos de agujas, esas que el tiempo nos clavo a conciencia por ir en su contra, sientes como los días nos apuñalan por la espalda y como la rutina nos ahoga en su abrazo...y es entonces, cuando la única salida que nos queda es separarnos... siempre dijimos que un amor como el nuestro podría contra todas las barreras, siempre pensamos que estaríamos juntos por siempre, siempre creímos que nunca llegaría nuestro fin...pero lo que menos esperábamos, es que nos matara nuestro propio amor...con un tiro al corazón...con un arma de sentimientos donde solo hay una bala...que hace tiempo que nos espera...y entonces...solo sentimos frió.


Es cierto que donde hubo siempre hay, pero una vez muertos, nuestros lazos desaparecen...y eso es lo que nos paso...eramos muertos en vida, y ahora ya, no tenemos nada en común.


2 comentarios:

Meg dijo...

Hay lazos que ni la muerte puede romper porque aun despues de ella hay lazos que perduran aun en esa circunstancias.

En mi caso ni su muerte ni la mia podran romper ese lazo.

YaniRa dijo...

"Es cierto que donde hubo siempre hay"